Salimos 200, y llegamos 150, es decir, que un 25% de la tropa se nos murió por el camino. Simpático el recorrido... sobre todo las rampitas de hormigón del 30%... y las bajadas potentes, potentes.
Y que avería más maja la que tuve. Mire usté que llevo desde noviembre del año pasado dando tumbos por los montes, dando buenos llantazos, y ni un pinchazo si quiera... pues el sábado voy y en una piedra de mierda corto una cubierta (+/*MECAGLLLLBURP). Y para remate, a lo Miliki y Milikito, resulta que llevo una cámara de 26, desde la bajada a Marruecos, amarrada en el sillín. Es decir, que he transportado unos 1.500 km. una goma de 300 grs. de peso (calcúlese el trabajo invertido como w=fxs) para nada. Vamos, no tiré la bicicleta al río por lo cara que me costo, pero desde luego ganas no me faltaron.
Menos mal que llegó Rafa y él si que llevaba una cámara de 29.
Y antes de eso, el Samu, que iba conmigo, rompió la cadena. Mira que le dije "Samu, ¿conoces la subida?", porque llevaba metido el plato medio y llegaba ya la rampa de hormigón de Viaña. "Si, si, desde luego", me dice el incauto. clis, clas, track, clon... a tomar por el saco la cadena.
He comprobado tiempos y perdimos, muy aproximadamente, 30 minutos, que se dice pronto... más luego la afección que tiene la mala leche y la desgana.
Al final yo conseguí llegar el 76, cuando podíamos haber estado entre el 40 y el 50. De todas formas, ya se nota la rama de descenso en la forma. Hay que pensar en aprovechar los últimos días buenos, descansar una temporadita, y comenzar la preparación para la próxima TITAN DESERT que promete ser más cañera que nunca.
!Que bestia el Tini Zabala¡... y que bien Litu y Chisco, de los 10.000 del Soplao, que entraron 5º y 6º.
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